domingo, 20 de enero de 2013

ANTE LA LEY


Allí espera días y años.
Intenta infinitas veces entrar y
fatiga al guardián con sus súplicas.
Franz Kakfa.


      Violaciones, robos, homicidios, crímenes y ¡La Mentira!, todos se resuelven con justicia ante la ley- expresó un abogado.
      La familia sentía el chillido en el alma, las heridas, los traumas comenzaban a sangrar.
     Años de psicólogos y de peregrinar a la justicia no habían dado resultado.
     -Claro, si la justicia está ciega y sólo se preocupa en mantener el equilibrio de la balanza que sostiene- Repite Carolina entre lágrimas, risas y sentimientos encontrados.
     La única respuesta que obtendrá en los tribunales será:
-          Se está investigando, los tiempos legales difieren de los reales-
-El caso es que su hija ha sido secuestrada, violada y luego de varios días la han encontrado muerta a unos metros de la Capilla de “Santo Tomás de Aquino” en un descampado… Es lo que se sabe… En todo caso el Juez le informará de lo sucedido- dijo el perito a Carolina.
    Días después se encontró el cadáver del juez flotando en un río… Carolina opinó que:
  -“Todo acto delictivo no debe resolverse con Violencia también tenemos la alternativa de nuestros puños”-.

Autora: Adriana Comán.




miércoles, 9 de enero de 2013

El Fósil de la Escritura



  Había una vez...así empiezan las mayorías de las historias para niños, dicen que estos cuentos son mensajes adultos adaptado para los infantes.
  Había una vez una mesa, un sable o una escritora llamada Carla; quien empezaba todas sus obras de la misma manera, pero ¿dónde se iniciaba verdaderamente la narración o el poema? Parece que en el lápiz porque ya no creía en la herramienta primera del arte de la palabra: la imaginación. Ya no recordaba las cosquillas cerebrales que le causaban tanto placer en la mágica aventura de leer. Culpó a la gramática, al estilo, a la pragmática, a la lingüística, a la semántica, a las dichosas licencias literarias. Dejó de conquistar al tiempo, de quitarle un grano de arena de ficción, de creatividad; abandonó la lectura y pudo por fin  encontrar al asesino despiadado de sus obras, se dijo:
                                         -¡Son esas estructuras fosilizadas!-

   Aún no se sabe nada de Carla, salvo que es un fósil de la escritura encerrada en su caverna con una luz tenue y un gran basurero a donde van a vivir sus grafías.


Autora: Adriana Comán